Los relojes inteligentes se han vuelto un dispositivo imprescindible en las muñecas de millones de personas alrededor del mundo. No solo permiten consultar las notificaciones, pagar en establecimientos o realizar llamadas sin tener que sacar el smartphone del bolsillo, sino que también monitorizan nuestra salud las 24 horas del día, los siete días de la semana, a través de sus sensores integrados. Sin embargo, la mayoría de los smartwatches más populares tienen un problema: la autonom...