Continuamos viendo una preocupante tendencia hacia la censura conservadora en Internet. Ya vimos como —bajo presión de VISA, Mastercard y organizaciones de ultraderecha— tiendas digitales como Steam y Itch.io han tenido que restringir el acceso a videojuegos con contenido o temas sexuales y las redes sociales usan algoritmos para «ocultar» publicaciones que no consideran aptar […] Este contenido se publicó primero en GamerFocus