Ante las protestas recientes en Los Ángeles el escenario es complicado: por un lado, Donald Trump avanza en los dos puntos en los que su agenda aún tiene popularidad: migración y aplicación de la ley y el orden. Por otro lado, la legitimidad de Claudia Sheinbaum depende de la defensa de los connacionales, pero se acerca su participación en la cumbre del G-7 y próximas negociaciones con el país del norte.