Cuando pensamos en drones, una imagen futurista se cuela en nuestra mente: los visualizamos haciendo entregas a domicilio, con un pequeño paquete descendiendo suavemente hasta la puerta de casa. Aunque atractiva, esta visión simplifica demasiado la realidad. Llegar a ese escenario es mucho más difícil de lo que parece. Para entenderlo, basta pensar que los drones nacen dentro de la aviación, una de las industrias más seguras y reguladas del mundo. Allí, cada componente debe superar un ...