Hace unos días, en la planta de hospitalización psiquiátrica de un hospital madrileño con nombre de médico ilustre, se suicidó un hombre extranjero. No es algo infrecuente: cada cierto tiempo, en las plantas de psiquiatría del Estado español, alguien muy angustiado —a quien el personal ha dejado solo o sola— se quita la vida; una […]